Los franceses Marion Pinaffo y Raphaël Pluvinage observan, manipulan y experimentan con las interacciones físicas que nos rodean. Unen intuición y matemática, sensibilidad y tecnología.
Trabajan en escalas pequeñas y gigantes, utilizan papel, fuego, humo y sistemas inventados, en un mar de formas geométricas y color. Crean ese tipo de piezas que enganchan y que te pueden dejar con la boca abierta durante horas.