Alfred Trujillo es ilustrador, diseñador y docente en diferentes escuelas de arte y diseño. Un viaje a Marruecos le hizo cambiar el blanco y negro por el color, el lettering por las formas geométricas y el skate por las pantallas circulares. Su alterego Nomaszebras ha creado una serie de piezas que se han podido ver en El Corralito CCA de Terrassa, donde ha realizado su última estada artística. Líneas geométricas, colores flúor y capas superpuestas que invitan a imaginar espacios abstractos e infinitos en movimiento.




1/
¿De dónde sale el proyecto M_R_CCØ y por qué es un punto de inflexión en tu obra?
La necesidad del proyecto sale en verano de 2022, en un viaje a Marruecos de tres semanas durante el cual experimenté un proceso receptivo que dio un giro en lo que se refiere a gráfica y color de mi obra.
Quería traducir de forma plástica todo lo que había vivido: la intensidad de los mercados, los tonos terrosos de los paisajes y colores de los pueblos y ciudades, la calidez de la gente y su hospitalidad.

Posteriormente me di cuenta de que ese viaje no había sido sólo una estancia en un país diferente, sino una inmersión profunda en una forma de vivir y mirar que contrastaba con mi rutina habitual.
Con el paso del tiempo, esta idea fue tomando cuerpo: Al principio sólo eran sensaciones difusas, recuerdos fragmentados que no sabía cómo canalizar, pero a medida que iba reflexionando sobre ella, surgió la necesidad de darle una forma concreta.
2/
¿Cómo has desarrollado, técnicamente, las piezas de M_R_CCØ? ¿Qué papel ha jugado la parte manual y el DIY?
El desarrollo técnico de las piezas de M_R_CCØ parte de una necesidad de investigación. En el momento de empezar a elaborar las primeras ideas de este proyecto, priorizo la importancia de representar el resultado en un formato circular, un territorio que todavía no había explorado y que quería investigar a nivel visual y conceptual. Este enfoque se combina con mi relación con el dibujo y la geometría, que procede de la creación de tipografías y letterings pero con la voluntad de huir de la figuración y la mancha negra. A continuación, empiezo el proceso de representar estas formas como espirografías, patrones geométricos que pueden evocar las baldosas árabes de sus palacios y edificios tradicionales.



Además, necesitaba generar profundidad y un juego de superposiciones, algo que se resolvió mediante el uso de una pantalla hecha de tela de mosquitera, enmarcada con unos marcos circulares (hula-hoops) de madera.
Este proceso implica un fuerte componente manual y artesano, aplicando el concepto DIY pero combinándolo con técnicas más actuales. Así, dibujo las espirografías sobre las pantallas con rotuladores y pinto las telas inferiores con sprays de colores fluorescentes, creando un equilibrio entre experimentación, artesanía y exploración técnica.
3/
¿Qué recorrido formal le ves a esta obra? ¿Subirá al carro del movimiento, crecerá de formato, se multiplicará?
Puede ir en varias direcciones. Me gustaría que esta nueva fase de la obra se expanda en cuanto a formato, saliendo de los límites convencionales para incorporar soportes diferentes, con la posibilidad de incluirla en el espacio público.

El objetivo es transformar las piezas para que tengan movimiento, permitiendo distintos puntos de vista y una nueva interacción con el espectador. De este modo, la obra evoluciona no sólo en escala, sino también en la forma en que se percibe, incorporando nuevos materiales y cambios que invitan a una experiencia más dinámica.
El espacio, el movimiento y la interactividad serán clave para esta nueva etapa.

4/
¿En qué estás trabajando ahora mismo?
Actualmente estoy experimentando en el corte láser y el grabado para crear unas planchas reproduciéndolas en serie a gran escala, haciendo variaciones de formas y colores.
Otra idea será experimentar a través de pantallas de serigrafía trasladando las imágenes sobre diversos soportes como muros y paredes permitidas de la calle.
5/
¿Qué planes de futuro tienes?
Seguir desarrollando la idea de este proyecto haciéndolo evolucionar hacia otros formatos y materiales y unos sistemas más integrales y sostenibles.
Se podrá volver a ver la exposición M_R_CCØ, con algunos elementos nuevos, en abril en el Espai la Filanda de la Garriga.